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Hecha con ají picante del Valle de Río Negro (Mainque). Es un ají picante pero no mucho. En Argentina el picante no es muy popular, siempre hay prevenciones (el hígado, hemorroides, o que tapa el gusto). Este picante se siente pero realza los gustos. No es muy picante, para un mexicano, por ejemplo, es nada.
Va bien con carnes rojas, asado, vacío, con chorizo y salchicha parrillera. A muchos les gusta agregarle un poco a la sopa. Aquí en el sur algunos la comen con pan mientras esperan el asado. Se puede usar para cocinar salsas, guisos, locro, cuando uno no tiene ají picante fresco a mano o en lugar del ají molido seco. Pero a veces uno hace estas cosas y no quiere ponerle picante porque a algunos no les gusta. Entonces la botella en la mesa permite que cada uno agregue la cantidad de picante deseada.
Viene en dos variedades, común (con semilla y crema) o sin semilla. La salsa sin semilla es un poco menos picante.
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